26 noviembre 2007

DROGAS - EL ETER




Origen


Los antiguos alquimistas como el monje Basilio Valentín, autor de Las doce llaves de la filosofía, obtenían éter por la destilación de alcohol y ácido sulfúrico desde el siglo XIV.


Doscientos años después Valerio Cordus lo había identificado ya en un tratado alquímico como "aceite de vitriolo dulcificado". El secreto de su preparación salió a relucir hasta 1734 y más de cien años después, en 1848, gracias a diversas investigaciones, se generaliza su empleo.


Por su parte, el cloroformo que había descubierto mucho antes Souberain, "destilando el espíritu de vino con cloruro de cal", comenzó a utilizarse también como anestésico hacia 1847.QUÍMICAIdentificación El éter o cloruro de etilo y el cloroformo son líquidos volátiles.


ComposiciónLa fórmula del cloruro de etilo es C4H5O y la del cloroformo, CHCI3. Formas de adulteraciónDebido a que no existe un mercado negro de estos productos, adquirirlos en establecimientos farmacéuticos garantiza que no hay posibles formas de adulteración.


FARMACOLOGÍAMecanismo de acción y formas de empleoSus vías de administración son pulmonares o bucales. Para conseguir efectos lúdicos, generalmente se moja una tela con cualquiera de estos líquidos y se aspira. Al llegar al cerebro disminuye la actividad normal de las neuronas.


Dependiendo de su concentración pueden ocasionar: analgesia, excitación, anestesia quirúrgica o depresión total del sistema respiratorio. Usos terapéuticosDebido al potencial altamente inflamable del éter y a la toxicidad del cloroformo, los usos anestésicos de ambos líquidos están restringidos en la actualidad.


Los narcotraficantes emplean éter para extraer cocaína de la pasta base hecha con hojas de coca.DosificaciónLas dosis mínimas de cloroformo se obtienen con una o dos inhalaciones profundas o con la ingestión de 4 a 8 gotas disueltas en algún líquido. El éter requiere el triple o cuádruple de dosis para ofrecer las primeras variaciones sensoriales.


No hay datos concluyentes respecto a la dosis letal de ambos psicoactivos, por lo que se recomienda extremada prudencia a quien decida emplearlos.Efectos psicológicos y fisiológicosCuando son administrados oralmente, la duración de los efectos subjetivos de ambos fármacos alcanza entre dos y tres horas.


Dosis bajas de éter producen una desinhibición controlable así como una sensación de que se aguzan los sentidos y el intelecto. Dosis medias y altas suscitan alucinaciones visuales y sobre todo auditivas, así como una marcada desinhibición que puede manifestarse en el terreno sexual. Desde fines del siglo XIX se registran casos de "delirio ninfomaníaco" en talleres con atmósferas impregnadas por vapores de éter.


En cuanto a sus efectos fisiológicos, el gusto a éter y cloroformo permanece durante días en la boca y la garganta. Su empleo crónico ocasiona dolores estomacales y vómitos, insomnio, irritabilidad, debilidad física y pérdida del impulso sexual. Potencial de dependencia.


Ambos psicofármacos generan dependencia física y psíquica considerable con un mes y medio de uso frecuente; producen tolerancia y sus respectivos síndromes de abstinencia pueden ocasionar desde postraciones nerviosas, hasta violentos delirium tremens con desenlaces fatales.


DIGAMOS SIEMPRE NO A LAS DROGAS

1 comentario:

Jimmy dijo...

a mi el éter me gusta y no lo considero ni demasiado dañino ni demasiado aditivo.
digámosle a la gente 'libertad respecto a las drogas que quieres consumir' en vez de 'no a las drogas'
decir que NO no está tan bueno eh :)